
A través de un inserto publicado en el Diario El Mercurio, el Colegio Médico manifestó que comparte la necesidad de identificar y sancionar a los grandes emisores que cometen fraude, pero denunció que el sistema actual no es justo, carece de criterios claros y no asegura un debido proceso. Esto ha generado sanciones arbitrarias a muchos médicos y médicas a lo largo del país.
Este miércoles 23 de abril, en la página 3 del cuerpo C de El Mercurio, se publicó un inserto con una declaración pública de la Mesa Directiva Nacional del Colegio Médico, en la que se denuncia que la actual fiscalización de la emisión de licencias médicas se está realizando sin las garantías mínimas de transparencia y defensa para las y los profesionales afectados. En el mismo texto, el Gremio solicitó expresamente la suspensión de estos procesos hasta que se corrijan las graves falencias del sistema.
La publicación generó amplio interés en la opinión pública y abrió la conversación en los medios de comunicación. En distintas entrevistas, la presidenta nacional del Colegio Médico, Dra. Ana María Arriagada, junto al vicepresidente Dr. Iván Mendoza, reiteraron el compromiso del gremio con la ética y la condena total al fraude. No obstante, advirtieron que el problema no es la fiscalización en sí misma, sino la forma en que esta se está aplicando actualmente: sin criterios técnicos, mediante procesos arbitrarios, sin derecho a defensa y a través de plataformas que no garantizan la trazabilidad ni la adecuada notificación a los profesionales.
«Lo que vemos hoy es una fiscalización excesiva, desmedida, sin criterios claros y de una forma que no es adecuada, donde terminan siendo sancionados médicos que emiten un número completamente razonable de licencias médicas», señaló la Dra. Arriagada.
En ese sentido, la presidenta advirtió: «Hoy tenemos más de 300 casos de médicas y médicos a quienes estamos defendiendo por distintas problemáticas vinculadas a esta fiscalización o por querellas de las isapres. Algunos de ellos se enteran demasiado tarde de que están siendo investigados, a veces solo cuando ya tienen una multa o han sido suspendidos de emitir licencias. Esto vulnera nuestro derecho al trabajo y entorpece la atención de pacientes, precisamente en un momento en que enfrentamos presiones por productividad y listas de espera. En la consulta privada, esto incluso obliga a devolver el bono al paciente, porque no se puede ir sin su reposo indicado.»
El Dr. Iván Mendoza, vicepresidente nacional, enfatizó que el Colegio Médico ha sostenido múltiples reuniones con autoridades como la COMPIN y la SUSESO, planteando propuestas concretas para mejorar los procesos y las plataformas involucradas. Sin embargo, hasta ahora las soluciones necesarias no se han materializado.
Finalmente, la presidenta del Colegio Médico reiteró la voluntad del gremio de mantener abiertos los espacios de diálogo, pero insistió en que es imprescindible avanzar en medidas concretas y verificables en el corto plazo.
Revisa aquí el inserto publicado en El Mercurio: