La Mesa Directiva Nacional ha expresado su preocupación ante el reciente anuncio de la Asociación de Proveedores de la Industria de la Salud (Apis), que ha señalado que parte importante de sus afiliados dejarían de aceptar solicitudes de compra de los hospitales ante la abultada deuda que mantienen los recintos, y ante las denuncias recibidas por parte de profesionales de distintos recintos respecto a limitaciones presupuestarias y de insumos en distintos centros asistenciales públicos del país, los que impactan directamente en su trabajo diario y en la calidad de atención entregada a los pacientes.
Este martes, nuestro Consejo Regional Valparaíso informó sobre el quiebre de stock de medicamentos, materiales de uso médico y alimentación que viven hoy los hospitales y consultorios de la zona. Desabastecimiento que de no ser resuelto podría convertirse en una crisis sanitaria con consecuencias en el cumplimiento de metas sanitarias de los establecimientos y entregas de programas GES a los usuarios de la red.
El presidente del Colegio Médico Valparaíso, Dr. Juan Eurolo, indicó que sólo el Hospital Carlos Van Buren adeuda a la fecha 1.700 millones de pesos en pago a proveedores bloqueados, que son más de treinta empresas, y más de 9 mil millones en pago a proveedores en el periodo 2018 y 2019. Asimismo, que los hospitales de Casablanca, Quilpué y San Antonio presentan escasez de insumos y medicamentos tanto básicos como especializados, que ha obligado incluso a la suspensión de cirugías programadas.
En caso de detectar limitaciones presupuestarias y de disponibilidad de insumos en el sector público, la Mesa Directiva Nacional invita a hacerles llegar esta información a través del correo [email protected], con el fin de objetivar los antecedentes y presentarlos al Ministerio de Salud y Hacienda y exigir prontas soluciones, tanto en el corto y largo plazo.
